SARTAGUDA/ANDOSILLA - Decenas de vecinos participaron ayer por la mañana en la plantación de algunos árboles del proyecto Oinez Basoa, una iniciativa que pretende compensar en lo posible la huella ecológica que genera la masiva afluencia a la celebración del Oinez, este año en Lodosa y Viana, y en el que por primera vez han colaborado dos municipios; Andosilla y Sartaguda con cerca de 9.100 ejemplares.
Los actos comenzaron pasadas las 10.30 horas en Sartaguda junto al Parque de la Memoria, en una zona un poco descuidada y abandonada que ahora recuperarán. Tras un aurresku, intervinieron el alcalde, Paolo Albanese, y el edil de Agricultura y Medio Ambiente y Deporte, Jaime Zabaleta.
En este caso, los 580 ejemplares que van a colocar, explicaron, esperan que sean el primer paso de una ruta más amplia que acabe uniendo poco a poco lugares emblemáticos como el Parque de la Memoria con el pueblo, la presa, el río Ebro por el Sotillo, etc. Los árboles que a partir de ahora lucirán en Sartaguda son chopos, alisos, almeces, encinas, tamarices, pinos, arbustos, endrinos, cerezos y olivastros, entre otros.
Además, hasta allí también se desplazó ayer la consejera de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, Isabel Elizalde, que reconoció que este proyecto, que impulsó en su día la ikastola Jaso, “aúna muchos valores porque, entre otras cuestiones, presenta el euskera en la sociedad de otra manera”. Además, Elizalde aseguró que “hay que saber trabajar juntos” ya que, en este caso, “la naturaleza y el euskera no hacen daño. Necesitamos la naturaleza para respirar y los idiomas para comunicarnos. Ambos son instrumentos de respeto”.
Acto seguido todos los allí presentes comenzaron con la plantación de algunos ejemplares de estos árboles. Los más txikis, ataviados con botas debido al barrizal que allí había, fueron los que más disfrutaron.
DOBLE PLANTACIÓN La jornada continuó a mediodía en Andosilla, concretamente en el entorno de la ermita de Santa Cruz. Allí, tal y como explicaba el alcalde del municipio José Manuel Terés, van a plantar en los próximos días hasta 8.500 árboles en una superficie de diez hectáreas; 6.500 pinos comunes, 1.500 pinos piñoneros y 500 encinas.
Con el objetivo de reforestar esta parte del municipio, el Ayuntamiento ha destinado un presupuesto de 42.000 euros de los que el Gobierno foral subvencionará casi la mitad.
Terés reconocía que hay niños que van a estudiar a la ikastola de Lodosa y que cuando les presentaron el proyecto les pareció muy interesante ya que, además, era una manera de adecentar este paraje natural. De hecho, allí mismo van a colocar un panel informativo en el que se explicará con detalle en qué consiste el Oinez Basoa y en qué medida ha colaborado Andosilla.